Querido San Judas Tadeo, amigo fiel de Jesús y protector de aquellos que te invocan en sus momentos más difíciles, en este mes de febrero me dirijo a ti en busca de tu ayuda y tu poderosa intercesión ante Dios. Con el corazón lleno de fe y devoción, te pido que intercedas por mí y me brindes la fuerza y el consuelo que necesito para superar las pruebas que se presenten en mi camino.
En este mes de febrero, en el que celebramos el amor y la amistad, quiero agradecerte, San Judas Tadeo, por ser un amigo fiel y un protector incondicional de aquellos que te invocan. Tu intercesión divina ha sido testigo de muchos milagros y sé que, con tu ayuda, yo también puedo superar cualquier obstáculo que se me presente.
En este mes de febrero, te pido que intercedas por aquellos que sufren y que están pasando por momentos difíciles. Que les brindes consuelo, fuerza y esperanza para superar sus pruebas y para que sientan tu amor y tu presencia a su lado.
También te pido, San Judas Tadeo, que intercedas por aquellos que están buscando trabajo o que están pasando por dificultades económicas. Que les brindes la sabiduría y la guía que necesitan para encontrar el trabajo adecuado y para superar sus dificultades financieras.
Te pido también que intercedas por aquellos que están pasando por problemas de salud, que les brindes la curación y la paz que necesitan para superar sus enfermedades y para recuperarse completamente.
En este mes de febrero, te agradezco, San Judas Tadeo, por tu amor incondicional y por ser un amigo fiel en los momentos más difíciles.
Te pido que intercedas por mí y por todos aquellos que te invocan en este mes y siempre, para que podamos sentir tu presencia y tu ayuda en nuestras vidas. Amén.